Miley Cyrus gasta cada hora 150 euros para tener un cuerpo tan sexy

Miley Cyrus está que lo tira. Mirándola bien y pensando en su divino tesoro, la juventud, quién diría queMiley Cyrus necesita mucho para mantener su envidiable físico. Pero sí, parece que para la joven ex Hanna Montana, el entrenamiento diario para mantenerse en forma es de capital importancia, y cueste lo que cueste. Y tanto es así que no se mueve del sitio si no le acompaña el responsable de su cuerpo diez, su entrenador personal. Miley Cyrus no escatima. Un entrenador que, sin dudar que se lo merezca, obviamente también cobra bien los servicios prestados.

Miley Cyrus tiene que mantener la línea con nada más y nada menos que la nada despreciable cantidad de 25.000 dólares, o lo que es lo mismo, 20.000 euros al mes. Hagan cálculos. El caso es que la mayoría de las estrellas de Hollywood se gastan auténticas millonadas en asesores de imagen, peluqueros y cocineros personales así que Miley Cyrus no ha querido ser menos.

Miley Cyrus, por el módico precio de 200 dólares la hora, tiene a su disposición a su entrenador personal allá donde vaya, hasta tal punto que éste le acompaña en primera clase durante los constantes viajes que realiza la ex niña prodigio alrededor del mundo.

Miley Cyrus, a propósito de sus declaraciones no ahorra en mantener su ahora esculpida y envidiada figura, tal y como asegura el tabloide estadounidense National Enquirer. "No me importa que tenga que venir conmigo allá donde voy. Vale lo que cuesta. Nunca pensé que podría tener este aspecto", aseguraMiley Cyrusen la publicación norteamericana. La antigua estrella Disney, conocida últimamente por convertir el pilates en su nueva religión, podría estar poniendo a punto su cuerpo para su próxima boda. Eso sí, su dinero le está costando desde luego.

Pero no todo han sido facilidades para una Miley Cyrus que, mientras espera su lujosa boda en Hollywood y soporta consejos de la mujer de Will Smith, antes tuvo que abandonar su aspecto casiesquelético y también protagonizó vídeos subidos de tono con su nuevo cuerpazo.