Selena Gómez, Vanessa Hudgens, Justin Bieber: La destrucción

La perniciosa influencia de Vanessa Hudgens ya está haciendo de las suyas en la frágil sicología de Selena Gómez informó el portal neoclubpress.com.  

Y todavía algunos se preguntan por qué viajó de urgencia a Los Ángeles, desde Miami, para atenderse en el hospital Cedars-Sinai Medical Center. ¿Qué tenía la ex de Disney que se le vio con un parche en un brazo, como si le hubieran extraído sangre? ¿Y por qué se escondía Justin Bieber de las cámaras, en la parte trasera del auto?



¿Estaría borracho nuevamente? 


Cabe recordar que apenas una semana atrás Justin Bieber y Selena Gómez fueron vistos en un restaurante de la Florida discutiendo acaloradamente. Llamó la atención la embriaguez del cantante, que si siquiera tiene edad para consumir alcohol legalmente en ese Estado (mucho menos en el estado en que se encontraba). Tal es la desolación de Justin que le ha dado hasta por comprar una casa. 



El rodaje de la película “Spring Breakers” está pasando factura a una relación, la de Bieber y Selena, ya de por sí precaria si se tiene en cuenta el ecosistema en que se desarrolla y las circunstancias que la rodean. Y no es, como han pretendido ciertos medios, que el intenso trabajo haya hecho mella en la salud de la actriz. Es que en consonancia con la temática de un filme en el que las chicas beben hasta desplomarse, y con Hudgens como referente, cualquiera resbala y cae. En bikinis y alrededor de la piscina, sin Austin Butler ni Justin Bieber, la vida parece una película. Con peluca pelirroja, en traje de baño y enviando besos a la cámara, Selena Gómez ya no es más Selena Gómez. 



“Hay una parte de mí a la que le gusta destrozar cosas”, ha declarado Vanessa Hudgens. Esta chica es del diablo.