Si alguien leyera el artículo que el columnista Domenick Scudera escribió para The Huffington Post sin antes conocer los hechos, pensaría que Madonna ha realizado terribles y difamatorias declaraciones contra la comunidad gay.
Lejos de ello, lo que a este autor tiene "dolido" y "consternado" es un hecho muy sencillo: la broma que la reina del pop jugó a Ricky Gervais en la pasada entrega de los Golden Globe Awards al decir: "si siempre me veo como una virgen, ¿por qué no vienes y haces algo al respecto? Tengo años que no beso a una muchacha en televisión".
Este simple comentario, el cual fue parte de una broma para el show (probablemente incluso preparada, eso sólo ellos lo saben) ha sido tomado por algunas mentes débiles como "degradante para las mujeres y la comunidad homosexual".
Suena ridículo. Veamos, ¿acaso su valor personal como parte de la diversidad depende de los comentarios realizados por Madonna, o por cualquier otro cantante? Más allá aún: ¿alcanzará a comprender este columnista que se trataba de una simple y banal broma?
Tristemente, el nombre de Lady Gaga sale a relucir en su columna, lo cual le resta prácticamente toda la credibilidad al tema, y lo reduce a un simple enojo de un "little monster". Parece que esto marcara una tremenda diferencia: Madonna siempre ha hablado de ser poderoso y valerte por ti mismo. ¿Qué mejor mensaje puede haber que ese?
La comunidad gay, la cual ha luchado años por ser reconocida y respetada, sabe que sus asuntos más importantes van más allá de chismes entre fans de estrellas pop o bromas en televisión. ¿Por qué la comunidad homosexual no se une de esta forma para promover otro tipo de valores, tales como la monogamia, la autoestima y el respeto propio y por los demás?
La mejor manera de ganar respeto, es primero respetándote tú mismo. Si un grupo no quiere ser acusado de ser promiscuo o sexualmente desenfrenado por ejemplo, entonces es momento de actuar en consecuencia y madurar como grupo. Ello comienza con una decisión personal que implica crecer, cultivarse, informarse y madurar emocionalmente.
Pero no sucede así con Scudera: su máxima preocupación actual radica en que la señora Ciconne utilizó la palabra "girl" en televisión para referirse a un hombre. Tal vez es momento que proteste también por las bromas misóginas del programa "Two and a Half Men" o los chistes contados en prácticamente cada rutina de stand-up comedy.
O tal vez su mundo se reduce (¡otra vez esa palabra!) a lo que ve y escucha en televisión, lo cual es realmente alarmante.
Tanto para la comunidad gay, como para la heterosexual el tema del amor propio y el respeto a tu cuerpo y mente es básico en estos tiempos de cambio. Y ello no depende de ningún cantante o estrella pop: depende del despertar que le des a tu propia conciencia y espíritu.
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