Ahora se ha armado un gran revuelo en torno a las flatulencias de Katy Perry y su afición por los frijoles con tostadas. La propia cantante, quien está a punto de terminar su gira “California Dreams” en el Reino Unido, se ha encargado de airear sus preferencias por esta comida “sonora”: “Me encanta Londres porque puedo tener frijoles sobre pan tostado”, declaró esta semana. “Es una receta que me hincha y temo salir volando como un cohete, pero la amo”.
¿Pero realmente qué de nuevo tiene esto de las ventosidades pop? Si acaso las judías enlatadas con salsa de tomate. Si acaso la sinceridad de Katy Perry, porque otras muchas estrellas musicales han sido víctimas este año, incluso públicamente, de sus flatulencias.Sin ir más lejos, tenemos el caso de Miley Cyrus, quien durante su reciente visita a Haití no paró de tirarse pedos. La cantante y actriz, que estrenará en la primavera de 2012 “LOL”, una película donde compartirá protagónico con Demi Moore, es conocida en su círculo inmediato por no medirse a la hora de trompetear. Sin embargo, esta afición tan “musical” de Cyrus no ha sido convenientemente registrada por el periodismo del espectáculo. Por algo será.
Otra que no se queda atrás en esto de las ventosidades es, como no podía ser de otra manera, Lady Gaga. A pesar de llevar una dieta más rigurosa que Miley Cyrus, Gaga no se anda por las ramas a la hora de dar de sí. Una de las flatulencias más sonoras de la diva, quien acumula seis nominaciones para los próximos 2011 MTV EMA Awards, prácticamente paralizó el rodaje del videoclip de “Marry the Night” hace pocos días. Una de las más sonoras y una de las más desagradables. Porque hay amores que matan, pero olores también.
